jueves, 16 de noviembre de 2017

EL MODELO DEL DESARROLLO HUMANO SOSTENIBLE DESDE LA PSICOLOGÍA COMUNITARIA

              I. INTRODUCCIÓN

       El desarrollo de un país no implica solo lo económico, sino también que las personas gocen de un entorno saludable, que tengan oportunidades de estudiar en instituciones prestigiosas, al igual que contar con un trabajo digno, tener un buen sueldo, participar de las elecciones de su país, sentir que su voz es escuchada y formar parte de una organización. Oportunidades que permitan potenciar sus competencias para tener una mejor calidad de vida.

   Así mismo la psicología comunitaria se encarga de estudiar los factores psicosociales que permiten desarrollar, fomentar y mantener el control y poder que los individuos ejercen sobre su ambiente individual y social, para plantear soluciones a los problemas que los aquejan y así lograr cambios en el ambiente y su estructura social.


                   II. DESARROLLO HUMANO SOSTENIBLE 


       
    El Desarrollo Humano Sostenible es una nueva filosofía de desarrollo, un enfoque equitativo y social que busca mejorar la calidad de vida sin dañar al medio ambiente, según Anand y sen s/f, citado en PNUD, 2014, la definen como “la expansión de las libertades fundamentales de las personas del presente mientras realizamos esfuerzos razonables para evitar comprometer gravemente las libertades de las futuras generaciones”. Según Bergh & Jeroen, 1996, citado en Gallopín, 2003, el concepto de desarrollo sostenible se introdujo a fines de los años setenta refiriendo a una interacción entre el desarrollo económico y la preservación del medio ambiente.





      El concepto de desarrollo humano se desliga de la de desarrollo en los 90, ya que su concepto era demasiado básico y solo refería a lo económico y era insuficiente para comprender el concepto de manera integral (Vargas & Hernández, 2012), las diversas definiciones comparten la relación entre lo económico y ecológico. La definición más citada en la de la Comisión de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Desarrollo, este modelo se enfoca en tres clases de derecho: el derecho a vivir una vida larga y saludable, el derecho a una formación durante toda la vida y el derecho a ingresos que le permitan tener una vida digna. 


    El Desarrollo Humano Sostenible, se enfoca en mantener un orden social en la comunidad capaz de asegurar la equidad, para mejorar la calidad de vida para todos y ofrecer un orden económico y estilo de vida adecuado, que amplíe las oportunidades de trabajo y garantice la subsistencia y la autosuficiencia de las personas, del país y del planeta. Según Griffith, 2000, el desarrollo humano va más allá que el poder adquisitivo, es “propiciar que la gente disponga de mayores opciones, vivir una vida larga, eludir enfermedades evitables, etc. 




      Se debe administrar los recursos tomando en cuenta las consecuencias a largo plazo. El desarrollo humano sostenible se caracteriza por ser: integral (económico, social, político y cultural), continuo, sostenible, por utilizar de forma correcta los recursos naturales disponibles y es centrada en la persona.

     De acuerdo a Vargas & Hernández, 2012 el DHS debe estar compuesto por cuatro dimensiones, estas son necesarias por igual, aunque en algunos momentos alguna necesite mayor relevancia. En cada dimensión existe aspectos o variables que deben ser promovidas por su importancia para el mejoramiento de la calidad de vida de las personas y de la vida en el planeta, pero también, y por las mismas razones, hay factores que deben ser limitados. La dimensión social refiere a las relaciones interpersonales de las personas dentro de su comunidad, la institucional se encarga de regular la participación de las personas en su medio, lo económico refiere a la actividad de intercambio de bienes y servicios, mientras que la dimensión ambiental se encarga del reconocimiento de todos aquellos recursos viables o dañinos para la persona.

       El PNUD 2016 plantea los objetivos del Desarrollo Humano Sostenible


                   





                  III. COMENTARIO ANALÍTICO



       El modelo de Desarrollo Humano Sostenible a partir de la Psicología Comunitaria fomenta la participación de las personas dentro de la comunidad, desarrollando y potencializando sus competencias, capacidades y habilidades para que ellos sean protagonistas de su propio cambio, estableciendo una relación bidireccional favorable con el ambiente, quien es generador de oportunidades. Además, se encarga de realizar una mejor comprensión sobre de la actitud que se tiene acerca de la comunidad. Tener conocimiento de todo ello permitirá la perduración de generaciones que cuenten cada vez con una mejor calidad de vida (Gallopín, 2003). 

       Es de suma importancia siempre tener presente el objetivo de este enfoque la cual es “cubrir las necesidades del hombre sin infringir en los límites del medio ambiente”, de acuerdo a ello el modelo ecológico de la psicología comunitaria se ajusta con este enfoque, y que ambos tienen una finalidad y es mantener la interacción entre el individuo y el medio ambiente (Holling, 1973, citado en Gallopín, 2003).




                   IV. CONCLUSIONES

      En conclusión, el Desarrollo Humano Sostenible se encuentra dentro de un enfoque multicausal (social, económico y medio ambiente) que busca mejorar la calidad de vida de las personas sin comprometer la naturaleza ni el futuro de los futuros descendientes. Las decisiones que se toman hoy acerca de los recursos debe ser pensando en las consecuencias del futuro. La calidad de vida es un componente muy importante dentro de la reconfiguración de competencias y habilidades del ser humano, la cual refiere al objetivo primordial del DHS.

      El Desarrollo Humano Sostenible busca cambiar su concepción de estar comprometido solamente en el tema económico a un enfoque socioambiental.







              V. ENLACES


       Para visualizar algunos ejemplos puede acceder a los siguientes links:

             VI. BIBLIOGRAFÍAS

  •  PNUD (2014). Informe sobre Desarrollo Humano: Sostenibilidad y equidad: Un mejor futuro para todos. Recuperado de file:///home/lenovo/Descargas/Informededesarrollohumano.pdf


miércoles, 6 de septiembre de 2017

HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA COMUNITARIA EN EL PERÚ

              I. INTRODUCCIÓN

       Durante muchos años hemos sido testigos de los problemas que aquejan a nuestra sociedad sin realizar ninguna acción que ayude a combatir ello, pero ¿existe un profesional que se encarga de estas situaciones problemáticas en el país? ¿Un especialista que vele por el bienestar de las comunidades? La psicología comunitaria es una disciplina reciente que surgió a finales del siglo XX, en EE.UU y se expandió con mucha rapidez por toda Europa y Latinoamérica, llegando así al Perú, esta rama de la psicología se enfoca en las situaciones socioeconómicas y políticas por la que atraviesa las comunidades dentro de un país.


       En la década de los 50, definen la psicología comunitaria como una estrategia metodológica basada en la investigación- acción de acontecimientos sociales orientada hacia la concientización y el cambio social de las comunidades, años más tarde Rappaport (1977), citado en Montero, M. (1984), la define como la búsqueda de alternativas a normas sociales establecidas, y Mann, L (1978), citado en Montero, M. (1984), considera que la psicología comunitaria se ve apoyada en tres áreas fundamentales y que estas constituyen parte de sus objetivos: el análisis de procesos sociales, el estudio de las interacciones en un sistema social específico y el diseño de intervenciones sociales. Según Escovar (1979), citado en Montero, M (1984), la define como una psicología para el desarrollo, entendido como el proceso mediante el cual el individuo adquiere un control mayor sobre su medio, gracias a los aportes de estos autores se puede definir a rasgos generales que la Psicología Comunitaria es una rama de la psicología cuyo objetivo es el estudio de los factores psicosociales que permiten desarrollar, fomentar y mantener el control y poder que los individuos pueden ejercer sobre su ambiente individual y social, para solucionar problemas que los aquejan y lograr cambios en esos ambientes y en la estructura social (Montero, 1984).


               II. DESARROLLO


       La Psicología Comunitaria en el Perú se inicia con los aportes brindados por parte de los trabajos de médicos: Casimiro Ulloa (1891). Hideyo Noguchi., Gutierrez Noriega (1936), F, Cabieses; psiquiatras: Honorio Delgado, Hermilio Valdizán, Javier, Mariategui, Humberto Rotondo, Caravedo, Zapata, Carlos, A, Seguin, Luis Guerra, Maldonado, Rotomdo, Max Silva, Zapata, Sal y Rosas, Caycho, Rodriguez Rabanal, A. Péndola, E. Majluf, M. Hernádez, S. Peña, Maestre, Gheiler, Querol; filósofos: Saco, Pinilla, Guerra, Abugatas, Miro Quesada, Ibañez, R. Prado, Chiapppo; y otros científicos: Santiago Antunez de Mayolo.





En el ámbito de trabajo varios eventos que ocurrían durante los años 50 y 60 como las migraciones y el cambio de paradigmas sociales fueron parte de su formación. Durante esta época se debe resaltar el trabajo de María E, Mansilla quien desarrolla la Psicología Comunitaria en el país siendo así la pionera de esta tarea, realizando los primeros encuentros de psicólogos comunitarios. Mansilla inicia el trabajo comunitario con niños de la calle, abordando temas de género, educación y de desarrollo científico (Alarcón, 2013).


     Así mismo quien brinda grandes aportes en relación a experiencias clínicas comunitarias es Carmen Pimentel quien funda el servicio de Psicología en el Hospital de Collique ubicado en Comas, este establecimiento fue el primer centro psicológico de atención para la comunidad, quien más tarde publica “Familia y Violencia en la Barriada” y funda el Cecosam en Villa El Salvador en 1987, que labora hasta la actualidad, otras experiencias pioneras de este corte fueron por parte de Pedro Avilés: el primer proyecto de Consultorio psicológico Municipal, dirigida por María Ángela Cánepa con CIPEP que se desarrolló en el Cono Norte; Vallejos y Edwin Manrique en el Hospital Valdizán; Victor Montero, Gaby Hernández y Wong con el Proyecto Atención Integral PPJJ desarrollado en el Cono Sur, en consecuencia este proyecto comunitario fue el de mayor dimensión impulsado por el Colegio de psicólogos que posteriormente se convierte en los servicios Psicológicos Comunitarios que logra ampliarse a sectores como la Iglesia y FFAA (Alarcón, 2013).


      Otro de los primeros proyectos a nivel global fue el proyecto Atención Integral al niño y su familia en los pueblos jóvenes del Cono Sur organizado por Unicef en alianza con Salud y Educación en 1972. Este se desarrolló en Pamplona - Villa El Salvador y conto con la participación de Mariátegui, Melgar entre otros; Gaby Hernánde4z, Victor Montero y Luis Woing en Pamplona Alta. Empieza como un proyecto de Estimulación del Desarrollo del Niño, que se constituyó con gran éxito y logra construir módulos de estimulación en varios pueblos jóvenes, contando con el apoyo de la esposa del presidente en ese momento Fernando Belaunde, e incluso con el del Príncipe Árabe Talal, gracias al apoyo económico brindado se formaron promotoras de Estimulación Temprana que luego se convertirán en promotoras de Salud Mental. Este fue el primer proyecto que integró un organismo internacional con el Estado. En 1980 en la Universidad Católica forma un núcleo de proyección social y un consultorio psicológico en Carmen de la Legua, posteriormente fundan el Cesam con Villavicencio en1986 (Alarcón, 2013).

         Alarcón, 2013, menciona que surgen ONGs, proyectos y programas que investigan la problemática femenina y de género que surgió durante esos años, Zoila Hernádez forma la revista Mujer y Sociedad y realiza diversas investigaciones posteriormente. Otras ONGs que trabajaron estos temas fueron: Perú MKujer, Flora Tristán, entre otros. Otras experiencias se enfocaron en el sentido de Educación Popular como el brasileño Paulo Freiro y el sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez. En 1965 se constituye el CEAS como iniciativa de la Iglesia Católica para la defensa de los derechos humanos y contra los conflictos armados que se desarrollaban en la época. El Estado forma parte de estas experiencias comunitarias con programas psicosociales como SINAMOS que cuenta con el apoyode Carlos Franco, Mario Tueros, entre otros, surgen programas de salud, como el trabajo de la UDES de Lima que realiza diversos programas preventivos, también se cuenta con Hospitales: Vladizán, Olavegoya y Noguchi. En educación, se desarrolla el programa Wawahuasi, que vela por el bienestar de los más pequeños, INDIDE dirigido por Raúl Gonzales,Luis Palomino, entre otros.


      Después de ello se da la creación de la Cátedra de Psicología Comunitaria, en San Marcos, PUCP, USMP, y otras universidades. En San Marcos nace en 1984 con la propuesta de Víctor Montero y José Vallejo, en 1980 se crea en la Católica y en la San Martín el área se forma en el 2000. Los primeros trabajos dirigidos hacia la comunidad se inician en 1957, con el COPSI en San Marcos, con la participación de Amóros, Jauregui, Loli, Celada, Riveros, Soto y Dioses. En el ámbito rural es importante la colaboración de la Universidad Cayetano Heredia con la participación de C, Vásquez. La Universidad Villarreal es una de las primeras que promueve eventos académicos sobre el tema como: Jornadas, Talleres, Seminarios, etc. La Universidad Católica y Vallejo dan aporten en temas de brigadas psicológicas, la UNIFÉ realiza diversos proyectos comunitarios de proyección social, centrado en las familias. Psicólogos sanmarquinos forman en 1996 el Foro Peruano de Psicología Social que promueve conversatorios y documentos durante 8 años, con Víctor Montero, Carlos Arenas, Federico Tong, Roberto Sánchez, Hugo de la Cruz, Fanny Ludeña, José Ventura, David Tarazona, Zoila Boggio, entre otros ( Alarcón, 2013).



      Los psicólogos comunitarios cada vez más están diversificando sus trabajos en diversos temas como: pobreza, exclusión, desastres, discriminación y violencia después de los conflictos armados que se vivió en el Perú. Los proyectos de desarrollo comunal cada vez se amplían, pero son pocos los psicólogos comunitarios (Montero, 1984).



               III. ANÁLISIS CRÍTICO

        Según Montero (1994), el objetivo de la psicología comunitaria es crear modelos teóricos que correspondan a las necesidades de la sociedad, además de generar la participación de los individuos que conforman una comunidad, ser parte ello no solo significa sentirse identificado, sino que se adquiere una nueva forma de vida con compromisos y reglas que respetar, se debe de dar a conocer que la disponibilidad de la persona es una gran herramienta para poder afrontar cualquier problema que afecta la estabilidad de comunidad. De acuerdo con Alarcón (2013), después de que el país vivió la época del terrorismo, muchos problemas sociales necesitan ser tratados y es aquí donde más se necesita del apoyo del psicólogo comunitario, ya que en la actualidad aún se escuchan casos de discriminación, delincuencia, etc., todos aquellos problemas que hoy escuchamos por la noticia son producto de la gran crisis social que vivió el país por años y que aún no logra superar, esto se podría deber a que no existe el compromiso por parte de muchos individuos.








        IV. CONCLUSIONES


      Después de abarcar cómo surgió la psicología comunitaria en el Perú se llega a la conclusión de que esta rama de la psicología surge gracias a los aportes de muchos profesionales tales como médicos, psiquiatras y filósofos, ellos asentaron la base para que se realicen posteriores estudios, temas que aún se siguen tocando en la actualidad y que gracias a los aportes brindados por parte de los investigadores así como por parte del Estado en temas de programas sociales están cambiando paso a paso nuestro país.




                V. ENLACES

               VI. BIBLIOGRAFÍA